martes, 10 de diciembre de 2013

Difundiendo el Acogimiento en los centros de salud de Almería

A lo largo de 2013 más de un centenar de niños y niñas en situaciones desfavorecidas han encontrado un hueco entre las 89 familias que participan en el Programa de Acogimiento Familiar de Cruz Roja. Para que sean muchos más los menores que se integren en casas de distintas familias -frente a la alternativa de pasar por un centro residencial-, y para ampliar también el número de acogedores participantes, se está llevando a cabo una campaña de difusión del Programa. Pero en esta ocasión, y por primera vez en Andalucía, la difusión se está realizando en Centros de Atención Primaria. La iniciativa, con sede en Almería, posee un doble objetivo: Por un lado, potenciar que sean los propios trabajadores de los Centros de Salud los que den a conocer el programa entre los usuarios, y por otro, fomentar además la participación de familias entre los mismos profesionales.

No existe un perfil único para ser familia acogedora, por lo que el programa está abierto a todas las tipologías de familias existentes: personas solteras, familias con hijos o monoparentales, homoparentales, etc.

Por otra parte, existen diferentes modalidades de acogimiento –cada una de ellas con sus propios requisitos y características-, como son el Acogimiento de Urgencia o el Profesionalizado. En el acogimiento de urgencia se trata de dar respuesta lo antes posible a situaciones que requieren una separación inmediata del menor de su núcleo familiar.

Pueden beneficiarse de esta modalidad concreta de acogimiento niños y niñas de hasta 6 años y por intervalos de tiempo que suelen durar, como máximo, 6 meses (llegando a 9 meses en circunstancias excepcionales). La modalidad “profesionalizada” es exclusiva para personas acogedoras con titulación académica en el ámbito social, educativo o sanitario, ya que está orientada a menores que necesiten unos cuidados y atención especiales.

Está previsto que en breve, y tras un pequeño paréntesis, continúen el resto de charlas informativas previstas en más centros de Salud de toda la ciudad.


martes, 3 de diciembre de 2013

José Ramón Serrano, un "jovencísimo" premio Andaluna 2013

José Ramón y Lucía llegaron a su nueva casa un día de marzo de 2005. Antes de eso, habían estado en una casa de acogida, con otros niños y niñas de diferentes edades.No podían vivir con su madre, y la posibilidad de trasladarse con una familia acogedora traía a su vida la ilusión del comienzo de una nueva vida.

Han pasado 8 años desde entonces, y hoy en día cuesta imaginar que José Ramón, Lucía, Isabel y Rafael no hayan sido una familia al completo desde el principio.

Estos hermanos refieren, con una sonrisa en la cara, haber tenido la suerte de contar con "dos madres y un padre". Destacan que Isabel y Rafael les han apoyado en todo momento a la hora de mantener el vínculo y la relación con su madre biológica. Así, los encuentros con ella han ido acompañados, a lo largo de los años, de una actitud de empatía y respeto mutuos entre los adultos que ha ayudado a los chicos a realizar una vivencia vital positiva y enriquecedora.

La familia acogedora ha sabido comprender a la perfección la motivación y la esencia del acogimiento a lo largo de su experiencia; Isabel y Rafael han construido una “pequeña-gran familia”, y esta experiencia tan bonita es la que ha llevado a José Ramón, a sus 18 años, a salir a la calle con nosotros y ayudarnos a dar a conocer el acogimiento. ¿Qué mensaje mejor, y más directo, que el que puede transmitir un chico que ha vivido en primera persona lo que es el acogimiento, y que nos anima a embarcarnos en él?

Con este motivo, desde los Premios Andaluna se ha querido reconocer la labor solidaria y especial que José Ramón está realizando desde que cumplió la mayoría de edad. Para nosotros, este premio es también compartido con su familia, sin la que nada de esto habría sido posible.

Al verlos es fácil darse cuenta del sentimiento de amor y de unión que les une; al conversar con ellos uno tiene la sensación de que “estaban destinados a estar juntos, y de que siempre han sido una familia". Y lo mejor de todo, es que estos dos chicos tan especiales han podido crecer acompañados en el camino por su madre, el otro pilar fundamental de sus vidas.

Nos habría encantado compartir con vosotros el momento en que José Ramón recogió su premio en el Foro de la Infancia, en Málaga, el pasado 20 de Noviembre; desde luego, podemos deciros que fue un rato tan especial y emocionante como cercano: José Ramón, con la simpatía y naturalidad que le caracterizan, supo ganarse rapidamente el corazón de todos los asistentes.

Aquí tenéis algunas fotos del evento:











viernes, 29 de noviembre de 2013

¡Dentro de una pompa de jabón!

"¡Un helado de burbuja para una!”, “¡otro helado de burbuja para esta otra amiga!”, decía encima del gran escenario el Mago cocinero. La misma tarima por la que también desfilaron gorros de bruja, niños envueltos en pompas de jabón gigantes y algún que otro pañuelo escondido. Pero también hubo espacio para cuentos e historias de piratas que contar. Y es que muchos niños y niñas, y algún que otro mayor, han acudido a divertirse a los talleres y espectáculos que el equipo de Acogimiento Familiar de Cruz Roja llevó a cabo la semana pasada en la Biblioteca Villaespesa. Todo ello para concienciar y difundir la importancia del Programa de Acogimiento Familiar de Menores entre los almerienses.

El Patito Feo, La Isla del Tesoro… Todas páginas con aventuras en las que los más pequeños se sumergieron la tarde del martes. Voluntarios y técnicos del programa, apoyados por los propios padres, guiaron este taller de animación a la lectura llamado "La Cantina soñadora", en la que todos se convirtieron por un rato en feroces corsarios y grumetes. Al finalizar la lectura de sus historias todos los niños se hicieron con lápices y pegamento y se lanzaron a crear sus propios separalibros que al final de la tarde se llevaron a casa entre risas y buen humor.

Y al día siguiente hubo más. En el Día Internacional de la Infancia, el grupo de magos “4 Magos” asombraron a todo el salón de actos de la Biblioteca Villaespesa con su espectáculo en la Gran Gala de la Magia: Gabimagoo, Mago Zoilo Kerbassi y Mago Moebius transformaron la sala en una fiesta mágica con personajes divertidos y trucos para todos los gustos. Durante la tarde volaron risas y caras de estupefacción al ver desaparecer y aparecer pañuelos, alguna varitas mágicas rebeldes y, sobre todo, las grandes pompas de jabón que envolvieron a algún que otro pequeño colaborador del público.

Todo ello para recordar cuán importante es reír y disfrutar y cuánto lo es más durante la infancia. De ahí la importancia de dar a conocer Programas como el de Acogimiento Familiar para Menores en situaciones desfavorecidas, gracias al cual los niños y niñas encuentran un lugar donde sentirse en familia, disfrutar y ser felices.

Alba García. Voluntaria del Departamento de Comunicación de CRE Almería




















miércoles, 20 de noviembre de 2013

José Ramón, un joven almeriense implicado con el Acogimiento recibe el Premio Andaluna hoy en Málaga

José Ramón Serrano, uno de los jóvenes de nuestro programa, ya mayor de edad, recibe hoy en la VII edición de los Premios Andaluna de Atención a la Infancia en Málaga el premio ‘Menores de edad o jóvenes de hasta 21 años’ por su dedicación e implicación en la difusión y captación de familias de acogida en Almería, demostrando la importancia que el acogimiento familiar tiene para sus protagonistas: los niñ@s y jóvenes que, por diversas circunstancias, no pueden crecer junto a sus familias biológicas.

miércoles, 13 de noviembre de 2013

II Semana del Acogimiento Familiar

El próximo miércoles día 20 celebramos el Día Internacional de la Infancia , y con motivo de esta fecha tan importante para nosotros tendrá lugar nuestra “II Semana del acogimiento", con actividades y talleres infantiles y para toda la familia que realizaremos de nuevo en la Biblioteca Provincial Villaespesa.

Las actividades están abiertas a pequeños de Almería de diferentes edades, que podrán participar acompañados de un adulto. La semana tendrá como protagonistas la Magia y la animación a la lectura, recordándonos los derechos que todos los niños y niñas tienen al ocio y la educación:


MARTES DÍA 19 DE NOVIEMBRE

Taller de Animación a la Lectura: La Cantina Soñadora
18:00 h. , Sala Infantil y Sala de Exposiciones
La Biblioteca se convertirá en una Cantina de Piratas muy especial donde nos servirán cuentos que nos ayudarán a desarrollar nuestra imaginación.
Fabricaremos, además, un separalibros personalizado.
Es necesaria la inscripción previa (gratuita )en la biblioteca.
Máximo 25 niños/as. Imprescindible que estén acompañados por un adulto.
Edad recomendada: 6 a 9 años



MIÉRCOLES DÍA 20 DE NOVIEMBRE
Gran Gala de Magia a cargo de "M4GOS"
Gabimagoo, Mago Zoilo Kerbassi y Mago Moebius presentan el show de M4GOS, cuatro magos de Almería, un espectáculo repleto de magia, humor y diversión, para toda la familia.
18:00 h. , Salón de actos.
Entrada libre y gratuita. Público Familiar




miércoles, 22 de mayo de 2013

Cuando aprender se vuelve fácil

A lo largo del mes de mayo hemos puesto en marcha dos nuevos cursos, dirigidos en esta ocasión a niñ@s y jóvenes del programa.

El primero de ellos ha consistido en un “Taller de técnicas de estudio”, destinado a facilitar estrategias a niños de Primaria y E.S.O. para que pierdan el miedo a estudiar, y aprendan a enfocarlo de una formas más fácil y rápida. El trabajo, organizado en sesiones, se ha realizado a lo largo de dos semanas.

El taller, coordinado por una voluntaria del programa licenciada en Psicología, surgió como una forma de facilitar apoyo extra a las familias acogedoras en su actividad educativa cotidiana.

Esta primera convocatoria se ha puesto en marcha con un pequeño grupo de niños, con la idea de que el trabajo con ellos fuera lo más personalizado posible, así que, ¡esperamos poder repetirlo en breve con un nuevo grupo!

martes, 14 de mayo de 2013

"Una familia es el mayor tesoro que se puede tener"

La vida de Isabel y Rafael cambió y cobró un nuevo sentido hace ahora nueve años. También la de José Ramón y su hermana pequeña. La historia de este matrimonio almeriense y sus dos hijos de acogida es la de un amor a primera vista, un flechazo que a diferencia de muchos de los romances que aparecen en las novelas o en las comedias románticas, perdura y se mantiene vivo casi una década después. Ahora que José Ramón ha alcanzado la mayoría de edad, todos echan la vista atrás para repasar las experiencias compartidas y reafirmarse en que “una familia es el mayor tesoro que se puede tener”, como dice Isabel.

Tenían una vaga idea sobre el Acogimiento Familiar hasta que comenzaron a informarse atraídos por la posibilidad de convivir con un niño o niña extranjero los meses de verano. No sabían que también aquí, en su propia ciudad, había niños que necesitaban una familia y que esperaban contar con el cariño que ellos podían darles. Con los miedos habituales que surgen antes de tomar una decisión tan importante, aunque con ganas ya de dar el paso para ser padres de acogida, pensaban en cómo les gustaría que fuese su nueva familia. Isabel y Rafael querían acoger a un niño o niña, a poder ser con una edad entre los 4 y 7 años, para que contara ya con cierta autonomía y a la vez pudieran educarle en valores que ellos consideraban básicos. Su idea preconcebida dio al traste cuando los trabajadores que en aquel momento gestionaban el Programa de Acogimiento Familiar de la Junta de Andalucía les comentaron que había un par de hermanos que encajarían a la perfección con ellos. Lejos de poner obstáculos, Isabel y Rafael decidieron conocer a los niños y desde el primer momento se dijeron que, sin duda, ellos conformarían su nueva familia. “Fue inexplicable. Fue verlos y decir, son nuestra familia”, explica Rafael.

Así nace un hogar

José Ramón y su hermana residían en un centro de acogida de menores de Almería cuando las personas que entonces los cuidaban les preguntaron si querían conocer a unos amigos, ir a merendar con ellos, salir a dar un paseo… sin ser conscientes en ese primer momento de que una nueva vida se abría ante ellos. El matrimonio coincide en que “la fase de adaptación no fue nada complicada”. Los primeros pasos consistieron en quedar los fines de semana para compartir unas horas con los niños y, tras unas semanas, los hermanos pasaban todo el fin de semana en casa de Isabel y Rafael, experimentando ya una auténtica convivencia. “La diferencia es muy grande”, comenta José Ramón. “Aunque en el centro nos trataban muy bien, allí el cariño se reparte entre todos los niños mientras que con unos padres la atención y el cariño son solo para ti, no es lo mismo”.

A pesar de que desde el comienzo José Ramón apreció la suerte que era contar con unos padres como Isabel y Rafael, si le hubieran ofrecido ser acogido por ellos sin su hermana no lo habría aceptado. “Yo no me hubiera ido sin mi hermana”. “También tenemos a nuestra madre biológica, con la que nos llevamos muy bien y a la que quiero mucho, pero mi hermana es lo más importante para mí”, relata José Ramón.

Y lo mismo dicen sus padres de acogida, que afirman que “a pesar de que queríamos solo un niño o una niña, ni nos lo pensamos cuando nos propusieron a estos dos hermanos. Creemos que es fundamental que ellos estén juntos”. Por eso Isabel anima a las personas que quieran acoger a que den la oportunidad a grupos de hermanos, sean dos o incluso más. “Además de la satisfacción de acogerlos, ellos te ayudan y te apoyan, por eso le digo a la gente que no tenga miedo a dar el paso porque sean hermanos. El apoyo y el cariño se multiplica y ese es el mayor tesoro que existe”. “Si volviera a nacer, volvería a hacer exactamente lo mismo”, sentencia.

Dos madres, un padre y “muchas tías”

El papel del equipo técnico del Programa de Acogimiento Familiar de Menores de Cruz Roja es esencial para que sucedan historias tan hermosas como esta. “Aunque han sido unos niños muy buenos, siempre hemos contado con el apoyo de Cruz Roja. Para cualquier pequeña dificultad o duda siempre han estado ahí, y no sólo en posibles problemas con los niños, sino también para asuntos burocráticos. Nos han ayudado en todo”, destaca el matrimonio. De hecho, Isabel insiste en que “yo creo que hemos tenido más ayuda que cualquier otro matrimonio porque no existe ningún libro que te diga cómo ser buenos padres, así que todos tenemos las mismas dudas”.

José Ramón tiene claro que Isabel y Rafael han sido los mejores padres para él y su hermana. “Siempre han estado pendientes de nosotros y si han tenido que castigarnos, por nuestro bien, lo han hecho”. “Yo no veo diferencia entre los padres de mis amigos y los míos”, comenta. Ha tenido la suerte de contar con dos madres, un padre, y como dice refiriéndose a las técnicos del Programa de Acogimiento de Cruz Roja, con “muchas tías”. “Las cosas que quizás no quería contarle a mis padres podía decírselas a ellas y ellas siempre me aconsejaban y ayudaban”, explica el joven.

Por supuesto, la relación con su madre biológica nunca ha supuesto un problema para que el acogimiento haya ido bien. De hecho, la madre de estos dos hermanos está muy agradecida a Isabel y Rafael por la oportunidad que les han brindado a sus hijos y, por parte de los padres de acogida, siempre se ha facilitado la relación. Si bien este es uno de los principales miedos a los que se enfrentan las personas cuando deciden acoger, Isabel insiste en que “en nuestro caso no ha supuesto ningún problema, no hay que tener miedo por eso. Es su madre y eso no se lo puedes quitar”.

La base, cariño y respeto

No existen recetas ni libros para que una familia funcione, tanto en el caso del acogimiento como en una familia unida por lazos biológicos. Cuando se les pregunta sobre que les dirían a otras personas interesadas en acoger, Isabel y Rafael contestan que “esto hay que vivirlo. Cuando lo vives ves lo que te dan, que es lo mejor del mundo”. “Pueden surgir problemas como en cualquier familia pero con cariño y respeto se superan. Los niños se adaptan a tu forma de ser, además, el que sean dos hermanos ha jugado a nuestro favor, eso les ayuda a ellos y a los padres acogedores”, explican.

Probablemente, esos dos ingredientes, cariño y respeto, son los que han hecho que para José Ramón, ahora que ya ha cumplido 18 años, nada haya cambiado. Ni siquiera se plantea otras posibilidades que vayan más allá de seguir compartiendo su vida con su familia. “Para mí esto no tiene parte mala”, comenta con la naturalidad de quien de verdad valora lo que significa contar con el amor incondicional de unos padres.

Entrevista realizada por:

María del Mar Carrillo Ávalos
Responsable de Comunicación
Cruz Roja Española en Almería

lunes, 22 de abril de 2013

"Mi nombre es Mina y tengo 20 años"

Hoy queremos compartir con vosotros el conmovedor testimonio de Mina, una joven, ahora mayor de edad, que relata su vivencia en acogimiento familiar permanente a través de una carta escrita en primera persona:

Mi nombre es Mina y tengo 20 años.

Cuando tenía seis años mi madre y yo nos trasladamos a vivir a Almería. Antes vivíamos en Melilla. Mi padre había fallecido. Poco tiempo después de vivir en Almería, mi madre, por motivos económicos, no pudo hacerse cargo de mi y tuve que ingresar en un centro de protección de menores, pero no por eso mi madre nunca me abandonó, ella siempre estuvo presente, protegiéndome a su manera, nunca faltó a las visitas semanales que tenía concedidas, y si alguna vez faltó era porque no tenía dinero para desplazarse a Almería o porque estaba mal (tenía una pareja que la maltrataba).

Desde los seis años a los trece años aproximadamente, estuve en dos pisos de Nuevo Futuro. En los pisos las educadoras nos cuidaban muy bien y no nos faltaba nada, nos compraban todo lo que necesitábamos, y siempre estaban pendientes de nosotros, éramos seis en cada piso, nos querían mucho, pero no es lo mismo el cariño que ellas nos daban al que luego he vivido estando con Victoria y Fernando, la pareja que me acogió cuando tenía 13 años.

Cuando iba a cumplir trece años, mi educadora me dijo que si quería conocer a una pareja que había solicitado el acogimiento de una chica, yo dije que si, y ahí empezó una nueva etapa en mi vida.

Una tarde de verano, la psicóloga de mi centro y yo quedamos para conocer a Victoria y Fernando, quedamos en la Rambla para tomar un café, yo estaba nerviosa y pregunté muchas cosas, desde ahí empezamos los contactos. Me iba con ellos a la playa, a pasar los fines de semana, me visitaron en el campamento, celebraron conmigo mi 13 cumpleaños, y poco a poco nos fuimos conociendo. Me fui a vivir con ellos en febrero del año 2005. Durante el primer tiempo me costó trabajo llevarme bien con Fernando, no estaba acostumbrada a vivir con hombres, pero eso se superó con el tiempo.

Cuando me fui a vivir con ellos descubrí lo que era vivir en una familia, Fernando y Victoria me ayudaba y me apoyaban en todo, me daban todo su cariño y me ofrecieron una vida estable y segura, aunque muchas veces me obligaban a hacer cosas que no quería, pero era por mi bien.

Mi madre al principio del acogimiento tenía miedo de perderme, ella pensaba que era una adopción y que ya no volvería a verme, hasta que se dio cuenta de que las visitas eran igual y que podía contar con el apoyo de Cruz Roja para todo lo que necesitase. Las visitas las hacíamos en Cruz Roja, aunque podíamos salir siempre nos quedábamos allí porque estábamos muy a gusto. Mi madre siempre me daba buenos consejos: que estudiase, que ayudase a la señora Victoria, que fuese buena y esas cosas.

Cuando cumplí los dieciocho años el acogimiento finalizó y yo podía haberme ido con mi madre, que ahora está bastante bien o a otro sitio, pero lo hablamos en casa y decidimos seguir viviendo juntos, somos una familia (un poco rara pero una familia), sigo viendo a mi madre, voy a comer a su casa muchas veces, hace las mejores tortillas de patatas del mundo.

Como en todas las convivencias, han surgido dificultades y problemas que vamos superando.

Yo pienso que la mejor manera de salir adelante es teniendo una familia que te apoye en todo momento, por eso pido a las familias que den una oportunidad a chicos y chicas que como yo lo necesitan.

martes, 9 de abril de 2013

"Mis padres de acogida son lo mejor que me ha pasado en la vida"

José Ramón, un joven almeriense que acaba de cumplir 18 años, nos cuenta su emotiva experiencia en acogimiento familiar en una entrevista publicada en Ideal el pasado domingo: